domingo, 20 de junio de 2010



SOLO DIOS Y TÚ TENÉIS EL DON DE LA UBICUIDAD


lunes, 14 de junio de 2010

Calor y canciones




¡Joder, el calor era asfixiante! Mientras mi cuerpo trataba de hallar la postura menos incómoda para conciliar el sueño, en la calle unos guiris borrachos canturreaban el que seguro sería el himno de Alemania (no les culpo, había ganado su equipo con un contundente 4 a 0). Entonces pasó: concatenación de ideas, ¡pum! De pronto me vi tarareando otra vez esa canción:

Jesus, don't cry
you can rely on me honey
you can combine anything you want
I'll be around
you were right about the stars
each one is a setting sun
...

¡La humedad era insoportable! A través de la ventana no entraba ni una brizna de aire y mi piel parecía más un chicle aferrado a una zapatilla que otra cosa. ¿Cuánto tardará un cuerpo en deshidratarse? Los cánticos de los hinchas alemanes parecían haberse silenciado, ¿se trataría de un sueño? No. Otra vez escuché voces en la calle. Una risotada feliz e istriónica traspasó el umbral y llegó hasta mi almohada. Miré el reloj, eran más de las dos.

Cuando uno no puede dormir llena su cabeza con pensamientos para hacer frente a la soledad de la noche. A mi mente venían imágenes difuminadas y palabras sueltas: verde, mariposa, museo... ¡Qué calor! Necesitaba relajarme. ¿Cómo seguía la canción?

...
tall building shakes
voices escape singing sad songs
tuned to chords
strung down your cheeks
bitter melodies turning your orbit around
...

Alargué la mano en busca de agua. No quedaba agua en el vaso. ¡Mierda! ¿Y dónde coño estaba el ventilador? Entonces entré en un estado de enajenación mental: me molestaba el pijama, me molestaban las sábanas, me molestaba la piel, ¡me molestaba el mundo es sí mismo! Pero de bien poco sirve irritarse a tan altas horas porque no hay quien te tienda una mano a las tres y media de la madrugada.

El aire era pesado y denso en la habitación. Me quité la camiseta y apoyé las dos manos sobre los pájaros que tengo tatuados bajo el ombligo. Dibujé a tientas una línea imaginaria de una golondrina a la otra. El dedo se atascaba en la piel empapada en sudor.

Las seis ya. La luna parecía difuminarse en algún punto de un cielo cada vez más claro. Supe que llegar hasta el amanecer sería una tarea pesada y también supe que, de seguir así, en pocos minutos recitaría en voz alta toda clase de sandeces poco apropiadas.

Aún a riesgo de ser devorada por los mosquitos, fui en busca de mi reproductor de música y me senté en el suelo del balcón. Busqué ésa de entre la lista de canciones y me dejé engullir por la música y la salida del sol.

...
voices whine
scyscrapers are scraping together
your voice is smoking
last cigarrettes are all you can get
turning your orbit around.

martes, 8 de junio de 2010

Para María



Conozco a muchas Marías, pero solo a una como tú. Eres única, extravagante, generosa y muy divertida. Eres LA MARÍA de las Marías. Eres más grande, estupenda y auténtica que cualquier otra con tu nombre. Desde la M hasta la A haces honor al significado de tu nombre: "la elegida". Y no es de extrañar porque, ¿quién no te elige para sí? Yo tuve la suerte de que tú también me eligieras. Gracias por estar siempre.

TE QUIERO UN MONTONAZO